El fin de semana pasado, logramos juntarnos un grupo de amigos, pirados por las motos, y en concreto por las bicilindricas como son las Ducati y las Triumph.
La convocatoria venia de largo, y hacia varios meses que veniamos maquinando nuestra pequeña "quedada", y aunque tuvimos bastantes bajas respecto a la anterior, el numero fue mas que notable para hacernos ver, y sobre todo oir.
Las máquinas estaban "ensilladas", desde el día anterior. Limpia y reluciente. Maletas a los lados, aunque para "dar la nota", ya me iba a encargar yo, que habia movido a los demas para hacer la concentracion de Ducati y Triumph, para presentarme con mi otra montura, por "lesión" de la Ducatona, que estaba convaleciente en el mecánico.... jajaja, y habia cambiado el rojo "ferrari", por el azulon de la Susi.
Montamos a lomos de nuestra amiga, que tan fiel me ha sido en los muchos viajes que hemos hecho juntos, nos dirigimos Carlota y yo al punto de reunion en Villamediana.
Ya esperaban con un cafe en la mano, Javi, Miguel Angel, Julio y Maria, y Jose y como no... un caballero más a lomos de una preciosa Honda bien domada, para poner junto a mi suzuki, el toque de molinillo de las cuatro cilindros japonesas....
Saludos, bromas, café... y como no... esa sonrisa interior que se tiene por la mañana antes de un buen plan.
Arrancamos tranquilos. El bramido de los escapes libres inundó la plaza de Villamediana. El Mivv de Titanio que monta la Susi, recordó a los Ducatistas y a los amantes de las café racer que hay vida a parte de los Termignoni, Leovinci, o escapes libres de las Bonis...
Carretera de curvas hata el cruce de Ausejo. PArada. Un bramido se oye a lo lejos. El bi de la Scrambler anuncia queToño esta a punto de llegar a la cita como habíamos quedado.
Luego Tudelilla, hasta Arnedo donde ya nos esperaba Alberto y Ana... Con la presiosa ST2... sonando la pandereta... sonido único de Ducati.... Mas besos. MAs abrazos. Cruce de palabras. Risas de mi "peculiar ducati azul"...
Mas vueltas hasta Enciso. Parada obligada. Maquina del tiempo hacia el neolítico. Imagenes de fondo de los Dinosaurios de cartón Piedra en un paisaje inugualable. El pasado de los animales y el presente de las máquinas. Ayer y hoy en un estamba peculiar. Alguna foto....
Nos pusimos nuevamente en marcha, ya con los cuellos de las chaquetas bien cerrados. Siguiente parada Soria. recorrido por el Oncala. Los primeros km, muy tranquilos por lo malo del asfalto. Un paisaje precioso. A la altura del cauce del río. Se podia tocar con la mano. Mejora el asfalto. Se acelera el ritmo. Aumentan las tumbadas... cogemos altura. La temperatura se nota que desciende y el frio penetra por el sotocasco... Alguna vuelta fuerte.... forzando el cuentarevoluciones...nadie se queda atrás... aprieto el ritmo... vueltas en s, izquierda, derecha, izquierda, derecha... se oye el rugir de los Termis de Alberto al reducir que cierra el grupo. Puesto malo, pero no pasa nada, él es un buen y experto piloto.... Detrás de mi, la Boneville de Chino aprieta tuercas en mis frenadas... pero tampoco se queda...
Hacemos cota, y en lo alto del oncala, paisajes de prados a un lado y a otro... nieve a los lados. Ni un coche. Paz rota por el sonido de nuestras motos....
Con las barrigas llenas, y asentados los cafes nuevamente rumbo a la carretera. Enfilamos hacia piqueras. A medida que pasaba la tarde bajaba la temperatura. Calentamiento de ruedas, y nuevamente ritmo.
La subida al Piqueras antiguo a ritmo fuerte, cada uno por la diferencias de máquinas. Mucha sal en la carretera, que dio algún latigazo a la scrambler de Toño. Vueltas en herradura, tumbada en segunda y gas a tope… rugir de motor, tercera, cuarta.... apurada de frenada, nueva vuelta y reducida y otra… y otra… y otra… asi hasta las nueve vueltas del Piqueras. Alto lleno de nieve. UN paisaje espectacular delante de nosotros de la Sierra de La Rioja… Abajo el túnel. Mejora la ruta pero desaparece el encanto de un puerto de verdad…
Lo bajamos agrupados. Precaucion al máximo. Nieve a los lados, y mucha humedad. Peligro escondido en alguna vuelta. Desde ahí hasta el desvío de Ortigosa, el ritmo fue aumentando nuevamente. Un grupo de motos se intercaló entre nosotros. AL mirar por el espejo retrovisor una veintena de puntos blancos bailaban a los lados. Una R6 me adelanta. Otro gallo le cantaría si nos pilla a cualquiera de las Ducati´s a “ritmo de maricon el último de Next, ”…. Pero salir en grupo es pasear…. Pasear ligerito pero pasear. Y lo cumplimos.
Desvio de Ortigosa. Paramos y nos despedimos de las Triumph que vuelven para casa. Pero de repente vemos pasar una Multistrada negra con unas barras doradas…. Ese es Juan y Carmen que se unen con nosotros al final de la tarde para ir a la casa Rural de Ortigosa.
Llegamos al Pantano del Rasillo y nos bajamos de las motos. Han caído casi 300 km de curvas a lo largo del día y bien se merecen unas cervecitas y un rato agradable en el mirador del embarcadero del Pantano. Sin embargo la tarde se echa encima y a esta altitud refresca mucho. Nos vamos hasta la casa rural. Santiago, el dueño de la casa nos ofrece su vivienda con una magnifica hospitalidad. A cambio, nos pide un recado. 11 naranjas… Miguel Angel y yo, nos ofrecemos a ir a por ellas y algún pequeño agape para la noche. Lo que no calculamos eran las rampas del pueblo. Llegamos con el resuello justito.
La cena fue en el mirador los cameros. No se cumplio lo pactado con el dueño pero si lo pactado entre el grupo. Diversion, risas y mas diversión. Tambien vimos la cantidad de pimientos rellenos que se puede comer Juan… a falta de tortilla al infierno.
La noche se alargó hasta las tantas… aliñado por unos buenos gin tonic. A penas hablamos de motos. Excepcional. El cambio de la hora nos jugó alguna mala pasada… pero al desayuno estábamos todos… más o menos enteros. Entre salchichón y mermelada y el café de puchero retomamos fuerzas para nuestra jornada del Domingo.
Al poco rato estábamos en carretera, nuevamente en dirección de Villoslada, Montenegro y las Viniegras. Subimos el puerto de Montenegro, despacio, disfrutando el paisaje. Un guiño a los pirineos… aquí cerquita, en nuestra tierra. Parada en la cima. Foto y algún bolazo de nieve que se estampó en la sport 1000 de Miguel Angel.
La bajada también muy prudente y a ritmo de turismo. Viseras levantadas para oler la naturaleza. El cuentaquilómetros de mi Suzuki no pasaba de 30 por hora. Bajada hasta al valle. Viniegra de arriba y su fuente de los tres caños. Desfiladeros a la sombra. Humedas vueltas y graba en el suelo…despacio… mas despacio… y sobre todo no tocar el freno de adelante….
Llegamos a carretera limpia, y la cosa cambia. Doy paso a los que quieran apretar… un poco las tuercas… Miguel Angel se ofrece voluntario. Le sigue Alberto… Juan se resiste detrás, Jose y Yo cerramos grupo, y el que no se despega es René con el coche de apoyo. Precioso coche, buen conductor. Sigue el ritmo como uno mas.
Al llegar a Anguiano nos reagrupamos. Vuelvo a encabezar el grupo y nos vamos a comer a San Millán. Restaurante ya conocido. Vamos a seguro. Comida regional de primera calidad. Buen vino del año de Badarán.
Después de comer toca dormir la siesta. Los jardines del Restaurante y el buen tiempo nos lo ponen muy fácil…. Siesta de pijama y orinal.
A media tarde nos volvemos hacia Logroño… Despedida y cierre y fin de fiestas…Cada mochuelo a su Olivo. Una más para contar.
Se cierra la tarde con los mensajes obligados de nuestros compañeros maños confirmando su llegada a Zaragoza. Ahora si….Sin novedad –Gracias a Dios….
….Me encanta que los planes salgan bien.
